La pobreza energética no se va de vacaciones en verano

Se suele relacionar la pobreza energética con la incapacidad de los hogares de encender la calefacción en invierno para mantener la vivienda a una temperatura saludable, pero la pobreza energética no es solo eso, también es no poder encender un ventilador en verano, ya no el aire acondicionado, por miedo a no poder afrontar luego la factura resultante. Pobreza energética es tener la vivienda a una temperatura insoportable en julio y agosto, especialmente cuando vienen las dichosas olas de calor, porque la vivienda no reúne las condiciones necesarias y resulta imposible costear una reforma para impedir que se cuele el calor de la calle.